En la COP25 que se realizará en Chile el 2 de diciembre del 2019, se presentará el documento que detalla el nuevo compromiso de la reducción de gases de efecto invernadero en el país.
En el año 2015 en el entonces gobierno de Michelle Bachelet estableció la primera Contribución Nacional determinada de Chile (NDC) documento en el cual se presenta la lucha contra el cambio climático y el principal sustento del Acuerdo de París, donde se encuentran los compromisos de la reducción de gases de cada país.
En primera instancia (2007) Chile se comprometió a reducir el 30% de emisiones para el año 2030, pero el NDC lo consideró como insuficiente. Pero no solo Chile fue duramente criticado por la NDC, otros países del mundo también es por eso que se espera que para el año 2020 todos los países comprometidos presenten de forma obligatoria la actualización de sus NDC, esperando que aumenten la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
De acuerdo a lo establecido, no es necesario presentar su NDC antes de la COP26 de Glasgow, por otro lado Sebastián Piñera se adelantará y presentará la suya en la COP25 en Santiago, con la intención de reforzar su campaña como líder del cambio climático.
Si bien lo que se adelantará este 2 de diciembre no es el documento formal, de acuerdo a los comentarios de Carolina Urmeneta, jefa de la Oficina de Cambio climático del Ministerio de Medio Ambiente al Consejo Asesor de la COP25, el documento formal será presentado antes de marzo del 2020.
Por esta razón el gobierno ha estado trabajando más de un año en renovar su compromiso, donde se han reunido con diferentes expertos del ámbito privado y sociedad civil, donde la decisión final la tomará el Consejo de Ministros de la Sustentabilidad.
El “libro de reglas”
El gobierno debe considerar una serie de guías que se acordaron en la COP24 de Katowice, llamado “el libro de reglas” para su actualización de su NDC.
En el libro de reglas se encuentra los artículos prácticos del Acuerdo de París. Es decir el Acuerdo de París es el “que” y el libro de reglas el “como”, predeterminado principios mínimos para todos los países que deben presentar su NDC, que luego se aplicaran de forma obligatoria en el 2025.
Las reglas establecidas exigen un mínimo de orden, para así poder analizar y estudiar bien los compromisos globales, obligando a la transparencia: donde los países deben comprobar cómo calcularon sus metas y argumentar por qué proponen tal porcentaje de reducción de emisiones.
Futuro de las termoeléctricas.
Pilar Moraga, investigadora del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2 y subdirectora del Centro de Derecho Ambiental de la Universidad de Chile, considera que el gobierno debe poner una balanza entre lo social y lo político ante sus compromisos climáticos internacionales. “Es la única manera de avanzar en una acción climática efectiva, porque no se trata solo de lo técnico, no es solo cómo calcular el peak o cómo contabilizar las emisiones, es la visión de desarrollo país para 2050”, comenta.
La ONG WWF entregó al gobierno algunas propuestas que considera la transformación energética en Chile, entre algunas de las propuesta se puede ver el adelantar el anunciado cierre de las termoeléctricas a carbón para el año 2030.
“Son solo cuatro empresas, hay grandes posibilidades de energías renovables, ya son casi el 20% de la matriz energética, entonces creemos que es factible y no difícil adelantar el cierre de las termoeléctricas”.Explicó Ricardo Bosshard, director de ONG WWF.
Además la organización alemana Climate Analytics expuso un estudio donde detalla que si Chile quiere cumplir la meta 1,5ºC, debe cerrar las termoeléctricas para el año 2032 y no en el 2040.
Según los modelos que maneja el gobierno estos señalan que esta medida sería clave para lograr la meta de carbono neutralidad, ya que las emisiones bajarian considerablemente cuando las centrales termoeléctricas cierren definitivamente sus puertas.